Como uno de los talleres de coches situados en Fuenlabrada sabemos de primera mano que una de las dudas más frecuentes cuando alguien va a comprar un coche nuevo será decidir entre un modelo con correa o con cadena de distribución. Aunque cumplen la misma función, abrir y cerrar las válvulas de admisión para evitar que los pistones se golpeen, son dos elementos muy diferentes.
Para desempeñar su labor, tanto la cadena como la correa, coordinan los movimientos de la polea del cigüeñal. Estos elementos mecánicos son bastante conocidos por todos, sobre todo porque se trata de una de las averías mecánicas de mayor coste. En este artículo queremos explicarte las principales diferencias entre ambos, con la información adecuada podrás elegir el sistemas más adecuado para ti.
Correa de distribución
Esta pieza consiste en una tira que puede fabricarse con caucho, goma o nylon. Su superficie exterior es lisa, sin embargo, por el interior presenta forma dentada que permite encajarla con los engranajes de las poleas. La mayoría de los vehículos nuevos incorporan este sistema.
La fabricación de estas correas resulta más económica que la de las cadenas. Además, presentan otra ventaja importante su funcionamiento es más silencioso. Sin embargo, su desgasta más rápido y, en caso de rotura, puede dañar otros elementos mecánicos.
Cadena de distribución
En este caso no se trata de una correa, sino que es una cadena que se compone de eslabones metálicos. Su uso ha ido poco a poco cambiándose por la anteriormente citada correa. Sin embargo, resultan mucho más fiables, al ser más resistentes. Además, el desgaste es muy inferior, llegando en la mayoría de los casos a durar en buen estado tanto tiempo como el motor. Su principal desventaja es que su funcionamiento resulta mucho más ruidoso.
En Motor Montesinos esperamos haber resuelto todas las dudas al respecto. Ambos sistemas cuentan con pros y contras, aunque la tendencia actual es colocar la correa en los nuevos modelos de vehículos. En la búsqueda de motores más eficientes y silenciosos la correa gana posiciones, pero aún no ha alcanzado la fiabilidad que ofrece la cadena de distribución.
