Las luces largas del coche son un elemento básico a la hora de conducir de noche, pero estamos hablando de un recurso que no siempre se utiliza bien. Para que te hagas una idea, no solo estamos hablando de tu seguridad, sino de la del resto de conductores en carretera. ¿Por qué te decimos esto? Porque ponerlas en el momento inadecuado puede producir el deslumbramiento a quienes vienen de frente. Ese exceso de luz llega a producir accidentes, con lo que hay que tener mucho cuidado. Desde Motor Montesinos queremos ayudarte a saber cómo usar las luces largas del coche. ¡Te dejamos unos consejos!
Descubre cómo usar las luces largas del coche
- Apágalas a tiempo: Ya que hemos empezado el artículo, destacando la capacidad de deslumbrar de las luces largas del coche, vamos a decirte cómo puedes evitar estos deslumbramientos. Cuando veas que un coche se aproxima de frente, tienes que apagarlas y quedarte con las cortas. Eso ya te lo imaginabas, pero también debes saber que tienes que prescindir de ellas cuando te acercas a la parte trasera de otro coche. Se puede deslumbrar a través del reflejo de los retrovisores.
- Elige bien la carretera: De noche, hay carreteras más peligrosas que otras. Por eso, debes tener claro que estas luces son para vías en las que, principalmente, solo hay un sentido, poco tráfico y son rurales o poco convencionales. Te lo decimos porque no suelen contar con iluminación y tendrás que buscar ese extra para poder conducir con la máxima seguridad. En carreteras principales no tendrás que utilizar las luces largas del coche tanto como esperabas. Por otro lado, no debes usarlas en ciudad, salvo que entres en una zona que no se encuentre iluminada. Estas luces no son para áreas urbanas.
- Vigila el clima: Todavía son muchos los conductores que piensan que las luces largas ayudan a ver mejor, cuando hay poca visibilidad a causa de precipitaciones contundentes o gran cantidad de niebla. Al contrario de lo que pueda parecer, el reflejo de estas luces puede resultar contraproducente en estas ocasiones. De hecho, no es casualidad que los vehículos dispongan de faros antiniebla.
- Práctica: Aunque no te lo creas, de vez en cuando y en las vías adecuadas, puedes alternar ambas para familiarizarte con las largas. Como se utilizan menos, algunos no saben cambiarlas con agilidad y eso puede jugar una mala pasada en un momento determinado.
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